Si quiere dedicarse a la competición o simplemente hacer deporte de forma casual, lo mejor es desarrollar un buen fondo físico para que así la resistencia no nos sea un problema para disfrutar al máximo del deporte. Es lógico que si no estamos acostumbrados a realizar deportes, nuestro fondo físico no sea muy alto, pero todo es comenzar para ir desarrollándolo de la mejor manera posible.

Lo primero a lo que hay que atender y muchos corredores descuidan es la respiración. Sin una buena respiración durante todo el ejercicio es imposible tener un fondo físico excelente. Para llevar una buena respiración debe correr con la espalda recta y mirando al frente para así hacer respiros suaves a través de la nariz y la boca. Para inspirar usaremos la nariz, y para expirar usaremos la boca.

Luego hay que medir también a la velocidad en la que podemos correr sin poner en riesgo nuestro fondo físico. Aquí cada persona tiene una velocidad diferente, en la que se siente cómodo, sin estar notando un cansancio acelerado. Mantenerse en esta velocidad nos ayudará a aguantar más tiempo en carrera y ser constantes en nuestro esfuerzo.

Hay dos factores de fondos dependiendo del tipo de ejercicio que se realice, aerobio y anaerobio. El ejercicio aeróbico son los esfuerzos intensos y cortos, mientras que el anaeróbico son más moderados. Combinando ambos tipos de ejercicios podemos aumentar nuestra resistencia. Haciendo ejercicios cortos se podrá ganar más fondo físico ya que no consumimos oxígeno hasta que sobrepasamos el minuto de ejercicio intenso.

Siguiendo estos pasos podremos ir comprobando cual es nuestro fondo físico, y hasta qué punto podemos llegar. Como digo, para ganar un buen fondo físico hay que ser constante e ir teniendo una buena respiración sin sobrepasar nuestro límites de resistencia para no acortar el tiempo de resistencia.